Leones

CARACAS SE ALZÓ CON EL DOCEAVO TÍTULO

El libro de historia de Caracas BBC está escrito con tinta indeleble, páginas doradas que enmarcan la grandeza de una institución que se ha convertido en la mas ganadora de Venezuela. Son incontables las victorias y los momentos que se viven en cada juego disputado, es por ello que buscamos rememorar las gestas alcanzadas durante 83 años en el béisbol profesional. Un día como hoy, 29 de enero pero de 1980, Leones conquistó su título 12 al vencer en la final al Lara y te lo recordamos, con un extracto de la nota publicada por El Nacional y que se inmortalizó en el libro «70 ańos de glorias, 70 juegos inolvidables».

caracas conquistó su título 12 con victoria sobre lara 5×2

El Nacional | Elides J. Rojas (1980) | Los Leones del Caracas coronaron exitosamente una brillante campaña (fueron líderes de la eliminatoria) al conquistar esta noche el duodécimo título campeonil de su histo-ria, con un categórico triunfo sobre el Cardenales de Lara, 5 carreras por 2, apoyados en un hermético relevo del zurdo venezolano Pablo Torrealba y en la ofensiva de otros tres peloteros criollos, Antonio Armas, Leonardo Hernández y Jesús Marcano Trillo, quienes encabezaron un ataque de doce indiscutibles contra tres lanzadores larenses.


El equipo caraquista, digno heredero de las glorias del Cervecería Caracas, se impuso por cuarta vez en el «play-off» y obtuvo el derecho de representar al beisbol venezolano en la Serie del Caribe que comenzará el sábado en el parque «Quisqueya» de la capital dominicana. Los Leones debutarán en el primer juego de ese clásico enfrentando a los Vaqueros de Bayamón, campeones de la pelota puertorriqueña. Junto a los dos cuadros disputarán la supremacía del beisbol en el Caribe los conjuntos Hermosillo -titular de México- y los Tigres de Licey, campeones de República Dominicana.


Caracas, que salió airoso por partida doble el pasado sábado (4-2 en juego que fue suspendido por oscuridad la noche del viernes, y 6-5 en el segundo desafío de ese mismo día), colocó el play off a «punto de mate» al imponerse a Cardenales por tercera vez consecutiva, la noche del domingo 6-4, luego de fabricar racimo de cuatro rayitas en un séptimo inning tormentoso para los «pájaros rojos». Estos, sin embargo, reaccionaron en la cuarta confrontación de la serie y mantuvieron vivas sus esperanzas al vencer 6-5 en el partido realizado el lunes.


El triunfo decisivo de los Leones esta noche, frente a un Cardenales que batalló con denuedo -y por encima de sus reales posibilidades. fue logrado por una comunión de buena defensiva y oportuno ata-que, respaldados ambos por el pitcheo combinado de los zurdos Jack Hobbs y Pablo Torrealba. El primero se mantuvo en la lomita por espacio de cinco innings, en cuyo transcurso los larenses le golpearon solamente cinco hits -uno de ellos de tres bases salido del bate del brillante torpedero Williams Ereú- y le anotaron las dos únicas rayitas que pudieron fabricar a lo largo de los nueve capítulos.

Cuando Hobbs dio muestras de flaqueza en el comienzo del sexto tramo, permitiendo doblete de Greg Wells, el piloto Felipe Rojas Alou optó por relevarlo y entregó la trinchera al también siniestro Torreal-ba, quien retiró a los primeros cinco hombres que enfrentó. Torrealba, con estupendo control y efectivo uso de toda su gama de lanzamientos, toleró apenas un sencillo infield hit de Albert Castillo- y finalizó a todo vapor, poniendo out a sus últimos siete rivales en forma sucesiva.

El magnifico trabajo de esos monticulistas «felinos» contó con el necesario respaldo ofensivo. Armas, en primer término (bateó de 43 con dos anotadas y otra impulsada), Leonardo Hernández (de 43 con una anotada y otra empujada) y Jesús Marcano Trilo, con par de cohetes en cuatro viajes, apuntalaron el ataque de los campeones contra los serpentineros Randy Benson (perdedor), Kevin Keefe y Rich Lysander, utilizados por el piloto Vernon Benson a manera de tabla de salvación.

El Caracas, que logró reivindicarse con creces de su decepcionante temporada anterior, fabricó su segunda carrera del encuentro en el segundo acto cuando Antonio Armas conectó el primero de sus tres imparables, pasando a la intermedia por rolata de Ken Phelps. Un sencillo de Leonardo Hernández su primero de tres- lo llevó hasta el plato.


Los pundonorosos Cardenales, sin amilanarse ante ese estrago inicial, replicaron con par de anotaciones en el cierre del tercer episodio, que inició Ereú con tripletazo entre left y center. De seguidas, Albert Castillo negoció transferencia y Garth lorg hizo cometer error al campocorto Fischlin con batazo de bote alto, propiciador de la entrada a la goma del larense Ereú. Dave McKay recibió la orden de sacrificarse lo que ejecutó a la perfección, avanzando sus compañeros hasta las posiciones más cercanas al «home», y un difícil rodado de Greg Wells por tercera -que no pudo controlar el antesalista Jerry Manuel empujó la segunda del inning en las piernas de Castillo.


Fue ese todo el daño que pudieron hacer los Cardenales larenses al inspirado pitcheo de los caraquistas, porque en las entradas finales, los zurdos Hobbs y Torrealba se encargaron de frustrar las débiles aspiraciones de la consecuente afición local. Los Leones, en desventaja de 1-2, reaccionaron nuevamente en el comienzo del cuarto y, con tres anotaciones, empezaron a forjar su definitiva victoria. En esa entrada, Jesús Marcano Trillo pegó hit al left y Baudilio Díaz, quien había fracasado estrepitosamente en sus últimos trece turnos, acalló las rechiflas de los aficionados barquisimetanos al conectar una línea seca entre center y right, posesionándose de la segunda almohadilla y llevando hasta la goma los «spikes» de Trillo.

Otro indiscutible de Antonio Armas (al centro) fletó a Díaz y cuando el pitcher Benson incurrió en «wild», Antonio se corrió hasta el segundo cojin, avanzando luego a tercera por rolata de Ken Phelps. Frente al relevista Kevin Keefe -segundo monticulista larense en la noche- Wilibaldo Quintana despachó largo globo al jardín derecho que impulsó a Armas con la tercera carrera del acto.


En el séptimo, los Leones fabricaron su quinta anotación -ila del seguro!-, expulsando del box a Keefe. Leonardo Hernández pegó sencillo a la izquierda, llegó hasta la intermedia amparado en sacrificio de Fischlin, pasó a tercera con batazo rastrero al cuadro de Jerry Manuel, y pisó el plato cuando el receptor Westmoreland trató de sorprenderlo en la antesala, disparando desviado hacia esa almohadilla.


El Caracas fue, a la postre, frenado por el taponero Lysan-der, aunque amenazó en el noveno al pegar hits consecutivos Manuel y Murphy. Pero el amago -innecesario por demas-resultó sofocado.

Cuando el zurdo Torrealba retiró a sus tres enemigos del últ-mo inning (Moseby, Westmoreland y Carlos Cabrera) la euforia se desató en la cueva caraquista. La champaña se desbordó a raudales y los alegres Leones cargaron a hombros al mana-ger Rojas Alou, quien tiene ahora la encomienda de conducir al representativo venezolano en la serie que tendrá lugar en su terruño dominicano.

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