Conoce más sobre las leyendas de nuestro equipo
Alfonso Carrasquel
Uno de nuestros primeros grandes ídolos en la historia de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional. Hizo su estreno en la pelota criolla el 17 de enero de 1946, cuando se convirtió en el primer jugador en despachar un jonrón en el circuito profesional. El batazo se lo dio al estadounidense Bill Jefferson del conjunto Venezuela.
Carrasquel participó en un total de 21 campañas, de ellas 8 con el uniforme de los Leones del Caracas.
Sus mejores temporadas con los melenudos fueron en la 52-53, año en el que dejó average de .286 producto de 53 indiscutibles en 185 visitas al plato, con 10 dobletes y 4 vuelacercas, empujando 30 rayitas. Igualmente, sobresalió en la 56-57, cuando promedió .307 al dar de 189-58, incluyendo 9 dobles, 6 jonrones y 27 fletadas.
En las temporadas 58-59 y 59-60 ligó para .292 y .299, respectivamente.
De por vida Carrasquel jugó en un total de 813 juegos en los que consumió 2870 turnos al bate, conectó 795 hits, más 121 dobles, 45 jonrones y 354 empujadas, para promedio de .277.
En las grandes ligas, el “Chico” Carrasquel debutó con los Medias Blancas de Chicago el 18 de abril de 1950, 19 años después que su tío, Alejandro “Patón” Carrasquel, lo hiciera.
Alfonso dejó marcas de 1199 hits, entre ellos 172 dobles, 25 triples, 55 cuadrangulares, sumado a 474 remolcadas y las 568 carreras que anotó, durante sus diez temporadas en la Grandes Ligas.
Por todos estos logros es que “Chico” Carrasquel fue exaltado, junto a su tío, al Salón de la Fama de Beisbol venezolano, en el 2003. Su presencia en la historia fue producto de su gran calidad como pelotero a lo largo de toda su carrera profesional.
POMPEYO DAVALILLO
Inició una de las dinastías más importantes en la historia del beisbol profesional venezolano. Hizo su debut en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP) el 17 de octubre de 1952, día del estreno de los Leones del Caracas en la historia de la LVBP y del estadio Universitario. Se fue de 4-2 con dos carreras anotadas, otra anotada y una base robada. “Yo-yo”, como era conocido en Estados Unidos, se fajó como activo durante 13 temporadas dentro de la pelota rentada nacional, todas con el Caracas.
Sus mejores actuaciones con la divida melenuda se ubicaron en las siguientes campañas: 53-54, época en la cual dio para .288 (de 226-65), más 15 bases robadas; la 56-57 cuando dejó average de .300 (de 213-64); la 57-58 con promedio de .301 (173-52); la 58-59 con su tope de .331 (de 181-60) y la 60-61en la que dejó average de .301 (166-50).
En las mayores hizo su estreno el 1 de agosto de 1953, cuando vistió el uniforme de los Senadores de Washington.
Luego de su experiencia en la gran carpa sufrió una severa lesión en una de sus piernas durante el año 1954, lo cual obligó una forzosa ausencia hasta la de 1955. En ese zafra, Pompeyo se convirtió en uno de los primeros jugadores extranjeros en ser contratados para el exigente beisbol cubano, liga donde durante seis años, convirtiéndose en todo un ídolo en el equipo Sugar Kings, donde tuvo a un compatriota como compañeros, Elio Chacón.
Luego de su retiro como jugador activo, inició su trabajo como coach de los Leones del Caracas durante varios años. Se fue a Tiburones de La Guaira, para regresar al staff de los melenudos; fue manager de Águilas del Zulia y se coronó en los torneos 1991-92 y 1992-93.
Asumió el mando del conjunto capitalino en la 1994-95, tras la obligada partida de Phil Regan cuando lo designaron estratega de los Orioles de Baltimore, y en ese momento se llevó el título. Repitió con los capitalinos en la 1995-96, para ser estratega de Caribes de Anzoátegui.
Fue en el año 2006 recibió su exaltación al Salón de la Fama del Beisbol Venezolano, uniéndose a su hermano menor Victor Davalillo, quien fue inducido en el año 2003, entre los inmortales de la pelota rentada venezolana.
Victor DAVALILLO
Indiscutible astro de los Leones del Caracas durante 19 temporadas con los Leones del Caracas, hizo su estreno en la pelota profesional criolla en la temporada 1957-58 hasta alcanzar 30 zafras y dejar diversas marcas que, hoy en día, perduran.
“Vitico” es considerado por muchos como el mejor bateador que ha pasado por esta liga. En sus años con los capitalinos, Davalillo se llevó cuatro coronas de bateo, cifra récord que años más tarde igualaría Luis Sojo de los Cardenales de Lara. Sus cetros como mejor bateador fueron en las siguientes zafras: 62-63 (.400 Ave, de 160-50); 63-64 (.351, de 205-72); 67-68 (.395, 228-90) y 70-71 (.379, de 214-81).
Durante sus 30 campañas como activo, dejó promedio ofensivo de .325, luego de ligar 1505 hits en 4633 veces al bate, además de 668 anotadas, 191 dobles, así como 50 triples y 34 jonrones.
Jugó ocho series semifinales con los Leones y sus mejores fueron: 65-66 (.400 Ave, de 20-8); 70-71 (.429, de 14-6) y 74-75 (.350, de 20-7). De la misma manera, estuvo en ocho finales, sobresaliendo en la 63-64 (.412, de 17-7) y 72-73 (.455, de 22-10).
Jugó una temporada con los Azucareros de Portuguesa (híbrido entre Leones y Tiburones de La Guaira) y 10 con los Tigres de Aragua, luego de ser cambiado. Regresó a los melenudos en la 86-87, para conectar su hit número 1.500 de por vida el 5 de diciembre de 1986, frente a Félix León de los Navegantes del Magallanes.
En las grandes ligas, debutó el 9 de abril de 1963 con los Indios de Cleveland. Su paso en las mayores fue fructífero y continuó en la Liga de México por seis campañas, en las que ligó por encima de los trescientos y se adjudicó cetros de bateo.
Por todo esto es que en el 2003 fue miembro de la clase inaugural del Salón de la Fama del Beisbol Venezolano, para inmortalizar su gran carrera en la historia de la pelota criolla.
César Tovar
Conformó con su compañero Víctor Davalillo una de las mejores duplas que han pasado en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional. Tovar se estrenó en la campaña 59-60, para completar un total de 16 con los Leones del Caracas de las 26 que disputó en el circuito profesional criollo. Sus mejores zafras fueron: la 61-62 (.305 de average, de 213-65); la 64-65 (.357, de 207-74); la 68-69 (.317, de 221-70); la 70-71 (.338, de 207-70); la 71-72 (.333, de 255-85); la 72-73 (.320, de 200-64) y en la 73-74 (.305, de 236-72).
En siete semifinales con los melenudos dejó buena actuación en la 70-71 (al promediar .570 con el madero, de 14-8. Tomó acción en siete finales, de las cuales destacó en las siguientes: 61-62 (.409, de 22-9); 66-67 (.435, de 23-10); 68-69 (.387, de 31-12) y la 72-73 (.348, de 23-8).
En las grandes ligas hizo su estreno el 12 de abril de 1965 con los Mellizos de Minnesota. Al igual que Davalillo, fue un bateador insigne que desplegó sus cualidades en las mayores, en la liga mexicana y en la fenecida Liga Interamericana.
Es por eso que gracias a toda su trayectoria deportiva fue exaltado al Salón de la Fama del Beisbol Venezolano en el año 2003.
Luis Peñalver
La trayectoria de Luis Peñalver en el béisbol profesional venezolano es, sin duda, una de las más brillantes. Si bien no comenzó su carrera con los Leones del Caracas desde que firmó para el béisbol profesional en 1960, estuvo en 15 de sus 23 temporadas uniformado con la divisa capitalina, tiempo que le permitió dejar una huella imborrable en su historial.
Nacido en Cumaná, estado Sucre, su irrupción en la palestra fue durante los Juegos Deportivos Panamericanos de Chicago en el año 1959. Peñalver ganó el encuentro que le dio a Venezuela la medalla de oro y, por consiguiente, consiguió su firma para la pelota profesional. El conjunto de Oriente fue el encargado de adquirirlo, para luego jugar con Orientales y Magallanes. Esas fueron sus 6 campañas iniciales.
Pese a los problemas físicos que confrontó con el hombro y el codo de su brazo derecho, pasó a los Leones del Caracas en la temporada 66-67 para iniciar su transitar en la divisa de la Capital. Contribuyó en forma decidida a los 6 títulos conquistados por los Leones durante su permanencia en el equipo.
Una de sus mejores campañas fue la 69-70, cuando dejó efectividad de 1.40. Trabajó 135.1 entradas en 28 juegos y permitió 117 y 21 carreras limpias, más 60 ponches. Ganó 9 encuentros y perdió 3.
Cabe destacar que con Caracas pasó de las 100 entradas lanzadas y ganó 9 encuentros en dos oportunidades. Llegó a salvar, de la misma manera, hasta 4 choques por temporada, lo cual dice mucho de su versatilidad como pitcher.
Destaca su presencia en los records de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional con más juegos lanzados (384), innings (1516.1), triunfos (84), ponches (748), juegos completos (45) y efectividad (3.07). En las marcas colectivas de los Leones, también destaca en esos departamentos junto a lanzadores de la talla de Diego Seguí, Luis Tiant, José de la Trinidad “Carrao” Bracho y Orlando Peña.
Siendo estos sus principales argumentos para su inmortalización en el Salón de la Fama del Beisbol Venezolano en el año 2008.
Gonzalo Márquez
Otro de los grandes bateadores que ha dado de nuestro beisbol. Debutó en la LVBP, en la zafra 1965-66 con el uniforme de los Leones del Caracas, divisa que defendió por espacio de 19 temporadas. Sus mejores campañas con el club melenudo ocurrieron en: 67-68 ( .354 de 226-80 con 10 dobletes y 25 remolcadas), 68-69 ( .333 de 180-33 ) , 73-74 ( .302 de 205-62 con 8 dobletes y 23 fletadas) y la zafra 78-79 cuando dejó average de .313 producto de 76 indiscutibles en 243 visitas al plato, con 6 dobletes, 2 triples y 18 remolcadas. Actuó en 10 series semifinales con la camiseta de los melenudos. Sus mejores momentos en éstas fases fueron los siguientes: 72-73 (.500 de 24-12), 74-75 (.409 de 22 -9) y 76-77 (.389 de 18-7). Mientras que en 7 finales, Márquez destacó en las temporadas siguientes: 72-73 (.368 de 19-7) y 77-78 (.379 de 29-11). Se estrenó en Grandes Ligas, el 11 de agosto de 1972 con el equipo de los Atléticos de Oakland. Uno de los momentos más gloriosos en la carrera de Márquez, se registró el 4 de febrero de 1968, cuando en el play-off de esa temporada, remolcó 8 rayitas en juego ante los Tiburones de La Guaira.
Por estas hazañas es que recibió la inducción al Salón de la Fama del Beisbol Venezolano en el año 2008.
JESÚS MARCANO TRILLO
Conocido como uno de los mejores segundas base venezolano de todos los tiempos, perteneció en sus inicios dentro de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional a los Leones del Caracas. Firmado inicialmente como receptor, posteriormente lo convirtieron en camarero, sin duda una de las mejores decisiones que tuvo. De las 19 temporadas que transitó en nuestro país, 11 de ellas fueron con los Leones del Caracas. Sus mejores momentos se podrían resumir de la siguiente manera: la 73-74 (.300 de average, de 220-66, más 10 dobles, cinco jonrones y 34 empujadas); la 74-75 (.316 al irse de 225-71, más 11 dobles, tres cuadrangulares y 30 impulsadas); la 76-77 (.288 al irse de 226-65, nueve biangulares, tres jonrones y 24 fletadas); la 77-78 (.313, de 224-77, 17 tubeyes, cuatro estacazos de vuelta completa y 34 impulsadas); la 78-79 (.294, de 201-59) y la 79-80 (.306, al irse de de 108-33).
Participó en seis semifinales con los Leones, destacándose en la 76-77 cuando dejó average de .294 (de 17-5), mientras que en cuatro finales la mejor fue en la 77-78, momento en que ligó para .320 (de 25-8).
Los Atléticos de Oakland fue su primer equipo en las grandes ligas, donde debutó el 28 de junio de 1973.
“Manny” como fue conocido por más de sus 20 años de carrera profesional, fue elegido en 2007 como uno de los nuevos inmortales en el Salón de la Fama del Beisbol Venezolano.
ANTONIO ARMAS
Es la indiscutible representación del poder criollo. Antonio Armas jugó un total de 20 temporadas en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, 18 de las cuales estuvo uniformado con el equipo melenudo. En su prolífico accionar deslumbró en la 76-77, cuando dio para promedio de .278 (de 237-66), con 10 dobles, 9 jonrones y 39 empujadas; en la 77-78 con .316 (de 266-84), fijó récord para la liga de 62 anotadas, disparó 17 cuadrangulares y empujó 49; en la 79-80 al promediar .269 (245-66) más 14 tubeyes, 6 triples, 8 vuelacercas y 33 impulsadas; en la 80-81 con .263 (152-40) con 9 jonrones y 29 remolques; en la 81-82 al tener average de .288 (177-51), nueve dobles, 10 bambinazos y 33 impulsadas y, finalmente, en la 82-83 con .320 (97-31), ocho jonrones y 20 fletadas.
“Mr. Enero”, como fue llamado debido a su producción ofensiva en las instancias finales de las campañas, conectó 25 jonrones y remolcó 86 rayitas en postemporada, para ayudar al Caracas a coronarse siete veces.
Desplegó su poder en Series del Caribe, en la cual dejó impuesta la marca de más bambinazos de por vida en la historia de los clásicos caribeños. El orgullo de Puerto Píritu fue considerado también como un destacado jardinero defensivo.
Estuvo durante 14 años en el beisbol de las Grandes Ligas jugando para las divisas de los Piratas de Pittsburgh, Atléticos de Oakland, Medias Rojas de Boston y Angelinos de California. En su paso por la gran carpa conectó 251 cuadrangulares, la segunda cifra más alta entre los venezolanos que han actuado en las mayores.
Armas fue inducido al Salón de la Fama del Beisbol Venezolano en el año 2005, siendo miembro de la segunda camada de peloteros en formar parte de este selecto grupo.
BAUDILIO DÍAZ
Considerado como uno de los mejores receptores venezolanos en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP), debido a sus hazañas tanto en el circuito local como en las grandes ligas. El “orgullo de Cúa” hizo su estreno en la LVBP en la temporada 1971-72, permaneciendo 14 temporadas con los Leones del Caracas. No tuvo mucha acción en sus inicios, como sucedió también en sus primeros tres años en la gran carpa, pues sólo acumuló en ese tiempo 65 juegos jugados. Pero, como suele ocurrir con deportistas trabajadores, su titularidad se la fue ganando a medida que demostraba que podía con el compromiso a base de talento.
Díaz dejó una huella imborrable dentro del Caracas y dejó una marca en la LVBP de más jonrones en una temporada de 20, aún vigente. De sus mejores temporadas se pueden mencionar: la 77-78 (.229 de promedio, con 11 dobles, cinco jonrones y 48 empujadas); la 79-80 (.308, 16 tubeyes, 20 jonrones y 57 fletadas); la 81-82 (.255, 13 vuelacercas y 29 remolques) y la 82-83 (.298, seis jonrones y 38 impulsadas). Estuvo en ocho semifinales, destacando en las siguientes: 77-78 (.368, de 19-7, más tres cuadrangulares y nueve remolcadas) y en la 80-81 (.318, de 22-7). Asimismo, estuvo en seis series finales en las que descolló en la 77-78 (.400, de 30-12) y en la 80-81 (.500, de 14-7).
En su paso por las grandes ligas, jugó su primer encuentro con los Medias Rojas de Boston, realizando su primera aparición el 6 de septiembre de 1977. Hasta la temporada de 1989 cuando se retiró del beisbol organizado con los Rojos de Cincinnati.
El legado de “Bo” siempre será recordado gracias a su exaltación al Salón de la Fama del Beisbol Venezolano en el año 2006.
Ubaldo Heredia
En su época de lanzador activo con el uniforme de los Leones del Caracas, fue considerado como uno de los mejores serpentineros de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional. Debutó en la campaña 1972-73 y desde ese entonces acumuló un total de 16 zafras con los melenudos de 18 en total. Sus mejores torneos fueron: 79-80 (récord de 6-2 más efectividad de 2.70); la 85-86 (8-3 y porcentaje de carreras limpias permitidas de 2.44); la 86-87 (4-4 y PCL de 1.08, líder de la liga, además de récord para criollos); 87-88 (5-2 y 1.92); 88-89 (5-5 más efectividad de 2.74) y, finalmente, la 89-90 (4-4 más 3.48 de PCL).
Participó en 10 series semifinales en las que resumió sus mejores actuaciones de la siguiente manera: 85-86 (1-0, y 1.00 de efectividad) y en la 88-89 (2-1, 2.89 de PCL). En ocho finales con el uniforme de los Leones, Heredia resumió su actuación de la siguiente manera: en la 86-87 inició un juego, no tuvo decisión y dejó 1.23 de efectividad en 7.2 entradas lanzadas. Caracas ganó el título en cuatro juegos. Luego, en la 87-88, sumó dos como abridor dejó foja de 1-0 y 0.00 de efectividad. También los melenudos se coronaron.
Hizo su debut en grandes ligas el 12 de mayo de 1987 con los Expos de Montreal. Sólo jugó ese año en el que alcanzó dos inicios (0-1, 5.40 EFE, 10.0 IP, 6 K).
PABLO TORREALBA
Serpentinero zurdo que jugó un total de 18 campañas en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, de ellas siete con los Leones del Caracas. Sus mejores actuaciones desde el montículo se resumen de la siguiente manera: en la 76-77 dejó un récord de 1-3 con cinco salvados, efectividad de 3.65 permitiendo 15 carreras limpias en 35 entradas de labor. En la 77-78 ganó seis y perdió cinco, dejó efectividad de 3.16 en 102.2 innings en los que le anotaron 36 rayitas limpias. Luego, en la 79-80, quedó con 4-4 más uno salvado, lanzó 74.2 episodios, le hicieron 20 carreras, para efectividad de 2.41.
De por vida en el circuito criollo trabajó en 850.0 entradas, con un total de 33 victorias y 47 reveses, más 18 salvados, que le dejaron un promedio de carreras limpias permitidas de 3.58 por cada nueve innings.
En tres series finales con el Caracas ganó cuatro y perdió uno, lanzó un total de 22.1 capítulos, permitió una rayita limpia que le dejó 0.40 de efectividad.
Su estreno en las grandes ligas se produjo el 9 de abril de 1975 con el uniforme de los Bravos de Atlanta.
LEONARDO HERNÁNDEZ
Defensor de la tercera almohadilla para los Leones del Caracas en una época brillante, acumuló seis campañas de sus 15 en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional con los melenudos. Entre sus torneos con el Caracas se pueden destacar los siguientes: 79-80 (.252 de promedio al bate, 15 dobles, tres jonrones y 33 fletadas); la 80-81 (.281 de average, más 12 tubeyes, tres jonrones y 27 impulsadas); 81-82 (.236 Ave, 17 tubeyes, 3 triples, 10 vuelacercas y 32 remolques); la 82-83 (.248 al bate, 13 dobles, ocho jonrones y 34 traídas al plato) y la 83-84 (.256, 13 biangulares, tres cuadrangulares y 28 empujadas).
Con los Leones participó en cuatro semifinales, destacándose en la 82-83, cuando dejó average de .300 (de 20-6) un jonrón y una empujada. Estuvo en cuatro series finales, punteando en la 79-80, cuando ligó para .333 de average (de 12-4).
En las mayores, hizo su estreno el 19 de septiembre de 1982 con los Orioles de Baltimore. Estuvo en 1983 y 1985 con la divisa oropéndola y jugó su última en la gran carpa en 1986 con los Yankees de Nueva York. Su mayor cantidad de juegos fue en 1983, cuando estuvo en 64 encuentros y dio seis cuadrangulares.
Andrés Galarraga
Por su actuación con los Leones del Caracas y sus hazañas en las grandes ligas, Andrés Galarraga debería ubicarse entre el grupo de los mejores jugadores de beisbol de todos los tiempos en nuestro país. Debutó en la campaña 1978-79, para completar un total de 13 campañas siempre con el uniforme de los Leones.
Sus mejores temporadas se resumen de esta manera: 83-84 (.283 de promedio, de 237-67, más 12 dobles, cinco cuadrangulares y 31 empujadas); la 84-85 (.267, de 221-59, siete tubeyes, cuatro triples, siete jonrones y 29 empujadas); la 85-86 (.297, de 259-77, con 10 dobles, 14 biangulares, cuatro vuelacercas y 37 impulsadas); 86-87 (.328, de 183-60, 10 2B, 11 HR, 33 CI) y la 87-88 (.343, de 102-35, más seis dobles, cuatro jonrones y 21 traídas al plato.
Estuvo en siete semifinales, destacándose en las siguientes zafras: 86-87 (.474 de average, de 19-7, nueve anotadas, un tubey, un jonrón y tres empujadas) y la 87-88 (.438, de 48-17, 12 anotadas, dos dobles y cuatro impulsadas).
Participó en cuatro finales y en la 85-86 dio para .370 (de 27-10, tres biangulares, un estacazo de cuatro esquinas y tres fletadas). En la 86-87 ligó para .467 (de 15-7, incluyendo un doblete, dos para la calle y cuatro remolques), mientras que en la 87-88 dejó average de .320 (de 25-8, con un tubey y tres empujadas).
Gracias a toda su trayectoria es que “El Gato” Galarraga fue elegido para formar parte del Salón de la Fama del Beisbol Venezolano en el 2010, luego de su retiro del beisbol profesional en el 2004.
URBANO LUGO, HIJO
Lanzador falconiano que brilló con luz propia a los largo de su accionar en un total de 16 temporadas con los Leones del Caracas, su única organización en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional. “Luguito”, como se le conoce en el ambiente peloteril, ha sido uno de los mejores serpentineros que ha pasado en la historia de la divisa capitalina, y fueron innumerables lo logros alcanzado en su dilatada trayectoria. Se pueden resumir sus mejores campañas de la siguiente manera: la 86-87 (en 12 juegos, todos como abridor, completó tres, dejó marca de 5-4 más una efectividad de 3.27); la 88-89 (ganó siete y no perdió, para dejar promedio de carreras limpias permitidas de 1.47, líder de la temporada, al conceder 12 rayitas limpias en 73.2 entradas) la 89-90 (dejó foja de 3-4, más efectividad de 2.87); la 91-92 (ganó cuatro y no perdió, 2.53 de efectividad); la 92-93 (registro de 7-5 y PCL de 2.84); la 93-94 (fijó marcas personales en juegos abiertos con 15 y entradas lanzadas con 98.1, así como en victorias con ocho. Su efectividad fue de 2.75).
En 11 series semifinales, el nativo de Falcón destacó en las siguientes zafras: 86-87 (2-0, efectividad de 2.70); la 87-88 (1-0, y PCL de 1.50); la 89-90 (3-0 y 1.54 de efectividad) y la 90-91 (2-0 y 1.25 en EFE). En seis series finales con los capitalinos, sobresalió en las siguientes: 86-87 (lanzó el cuarto y último juego de la final frente a Tiburones de La Guaira, logrando un histórico no hit no run, el único en una final en la liga venezolana, que le dio el título a los melenudos) y en la 90-91 (1-1, efectividad de 0.61, al aceptar sólo una carrera limpia en 14.2 innings).
En las mayores se estrenó con los Angelinos de California el 28 de abril de 1985.
Por toda su trayectoria en nuestro país fue inducido en el Salón de la Fama del Beisbol Profesional Venezolano en el año 2009.
OMAR VIZQUEL
Es uno de los mejores short stop de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional y de las grandes ligas. Se estrenó con los Leones del Caracas en la temporada 1984-85 y jugó un total de 13 campañas, pues en la 2007-2008 se retiró oficialmente con los melenudos al disputar un total de 16 juegos en los que dio para .217 (de 60-13), con un jonrón, 10 empujadas y dos bases robadas.
Al enumerar sus mejores torneos se cuentan: la 87-88 (.332 de promedio, al ligar de 199-66, más siete dobles, cinco triples, un jonrón y 21 empujadas); la 88-89 (.263, de 228-60, nueve tubeyes, siete triples –líder del circuito- 12 bases robadas y 21 empujadas); la 89-90 (.286, de 175-50, 11 biangulares, cuatro triples, ocho robos de base y 16 empujadas); la 90-91 (.293, de 164-48, siete dobles, dos triples, seis bases escamoteadas y nueve impulsadas) y la 92-93 (.288, de 104-30, siete dobletes, dos triples, nueve bases robadas y 12 fletadas).
En ocho series semifinales ayudó en las siguientes zafras: la 92-93 (.318, de 44-14, con cinco bases robadas); la 93-94 (.310, de 42-13, tres dobles y cuatro robos de base) y en la 94-95 (.333, de 6-2 y dos bases robadas). Luego, en seis finales, destacó en las siguientes: la 89-90 (.281, de 32-9, más dos tubeyes, un triple y dos bases robadas); la 90-91 (.292, de 24-7) y en la 94-95 (.353, de 17-6, más cuatro impulsadas, lo que le valió ser el Más Valioso).
En las grandes ligas, Vizquel hizo su estreno el 23 de julio de 1989 con los Marineros de Seattle, organización con la cual jugó cinco temporadas. Hasta el año 1994 cuando llegó a los Indios de Cleveland para defender sus colores por 11 zafras, hecho que le hizo ser inducido al Salón de la Fama de la organización en 2014.
Entre varios de sus logros sobresalen 11 guantes de oro, además de sus 2877 hits en Grandes Ligas, número que lo ubica como el líder absoluto en imparables para un venezolano en las mayores. Esto luego de anunciar su retiro en la temporada 2012 cuando visitó por última vez su enigmático número 13 con los Azulejos de Toronto.
Vizquel es miembro del Salón de la Fama del Beisbol Latino, al igual que fue seleccionado en el 2018 para formar parte del Salón de la Fama del Beisbol Venezolano y se encuentra en la lista de elegibles para escribir su nombre en la inmortalidad de Cooperstown.
CARLOS HERNÁNDEZ
Junto con Baudilio Díaz fue una de las piezas fundamentales detrás del plato para los Leones del Caracas a lo largo de quince campañas. Carlos Hernández, todo un caballero, supo llenar la vacante dejada por Baudilio y llevó los encuentros con una maestría envidiable.
Desde su debut en el profesional en la 84-85, Hernández tuvo marcas personales interesantes, como las seis impulsadas en un encuentro (el 14 de noviembre de 1993 ante Petroleros de Cabimas) y los trece juegos seguidos con al menos un indiscutible (desde el 23 de noviembre al 8 de diciembre de 1991).
Memorable fue la última jornada de la Serie del Caribe del año 95, cuando discutió intensamente las sentencias del principal en el encuentro que terminó en derrota para Venezuela por un controvertido boleto.
En las rondas regulares, el nativo de San Félix, estado Bolívar, dejó promedio de por vida de .257 con 16 batazos de vuelta entera, 184 carreras empujadas y 140 anotadas, 68 dobles y 7 batazos de tres esquinas.
Sus mejores zafras fueron las de 91-92 (.290 de average); la 90-91, 92-93 y 97-98 (3 jonrones cada año); la 94-95 (25 carreras empujadas); y la 91-92 (13 dobles).
En el round robin semifinal, Hernández dejó promedio de .249 con 2 cuadrangulares y 33 carreras empujadas, siendo su mejor lustro la 94-95 donde tuvo average de .340 con 8 empujadas y 4 anotadas.
En series finales Hernández ligó para .275 con un jonrón y 6 empujadas, destacándose su labor en la final de la temporada 89-90 en que dejó promedio de .423 con un cuadrangular y 3 remolcadas.
OMAR DAAL
Este lanzador zurdo se convirtió en uno de los más dominantes de la pelota profesional de Venezuela. Su prominente curva es del tipo que deja al bateador de espaldas al terreno de juego luego de hacer swing. Su particular estilo de lanzar –dándole la espalda por completo al bateador- hace aún más incómodos sus envíos.
Daal empezó a colocar su nombre en alto al lanzar un juego sin hits ni carreras en la desaparecida Liga de Verano y tiene en su haber varios lideratos entre los lanzadores, como por ejemplo: Más victorias (10 en la 95-96, y 9 en la 96-97), más ponches propinados (67 en la 94-95, y 73 en la 95-96).
En la 95-96 el maracaibero estuvo muy cerca de la triple corona, pues acumuló efectividad de 1.68 al permitir 18 carreras limpias en 96 2/3 de inning. En semifinales Daal acumula un total de 8 victorias por 7 derrotas, con 3.00 de efectividad y 100 ponches propinados en 132 innings de labor.
En etapa de final, Omar Daal no ha tenido tanta suerte, pues registra 0-3 con 3.00 de efectividad. Su mejor final fue la de la 96-97 en que trabajó 15 episodios, permitió 9 hits y 3 carreras limpias, mientras abanicó a 8 magallaneros.
BOB ABREU
Bob Abreu se convirtió en uno de los íconos de la nueva generación de grandeligas de los Leones del Caracas.
Comenzó, junto a otros jugadores de su generación, a principios de la década de los noventa y, en muy poco tiempo, pasó a ser una de las estrellas de la pelota profesional venezolana, ya que gracias a sus oportunos batazos y a su potente brazo se ganó el respeto de los rivales y la admiración de la fanaticada caraquista.
Abreu colocó números impresionantes en distintas temporadas, como la 98-99 en que bateó para .419 para proclamarse como máximo toletero en lo que a promedio se refiere. Asimismo, Abreu tuvo un regreso explosivo a finales de la 2000-2001, campaña en la que tuvo promedio de .352 con 11 jonrones (2 de ellos ante el Magallanes el 23 de noviembre), y 28 carreras empujadas y 7 bases robadas. En su última presentación en ronda regular (2001-2002), Abreu finalizó con .402 de average con 8 vuelacercas y 25 impulsadas, quedando muy cerca de obtener su segundo campeonato de bateo por apenas unas pocas apariciones legales. En semifinales Abreu vivió sus mejores momentos en la 98-99, cuando acumuló promedio de .422 con 16 empujadas, 17 anotadas y dos triples para ayudar a los Leones a clasificar a la que fue su última serie final. En el round robin de la 96-97, Bob Abreu sacrificó el promedio para producir más carreras a favor de la causa melenuda, puesto que finalizó con average de .336 con 3 triples, 1 jonrón y 11 impulsadas. Tras una prolongada ausencia, Abreu volvió en la temporada 2012-2013 con Leones y un año más tarde, se erigiría como el Regreso del Año de la LVBP. Siendo la edición 2014-2015 cuando “El Come Dulce”, marcó su retirada del beisbol luego de disputar 17 encuentros con Leones en los que conectó 12 imparables, con cuatro dobles, dejando así su promedio vitalicio en .304.
Ugueth Urbina
Ugueth Urbina es conocido tanto por su meteórica recta como por la intensidad que demuestra cada vez que se sube al montículo a sentenciar un encuentro. Su mirada intimidante se combina perfectamente con la efusiva celebración después de sacar el out 27. En sus primeros años Urbina participó con los Leones del Caracas en calidad de abridor, acumulando 21 partidos iniciados, 14 victorias y 5 derrotas. Es en la temporada 97-98 cuando Urbina se convierte en el cerrojo del club. En esa campaña trabajó no permitió carreras en siete presentaciones consecutivas desde el 6 al 20 de noviembre. Fijó su marca personal en juegos jugados al saltar al terreno en 22 oportunidades y salvó 10 encuentros. Urbina reapareció en la temporada 2013-2014, con el uniforme de Leones, tras un largo tiempo fuera de los diamantes.
ALEX GONZÁLEZ
Oriundo de Cagua, estado Aragua, tuvo el privilegio de convertirse en su momento en el sustituto directo de Omar Vizquel, gracias a sus portentosas manos y poderoso brazo, así como un agresivo estilo de juego. Desde su debut en la campaña 1994-95 y hasta los momentos, González acumula una buena actuación que le ha dado un sitial importante dentro de la divisa melenuda. Su virtuosismo se puede apreciar mejor cuando actúa a la defensiva, debido a su plasticidad que muestra, cuyos resultados son dobles matanzas aparentemente irrealizables. En la temporada 2001-2002 hizo vibrar al estadio Universitario. Fue el 27 de noviembre contra Navegantes del Magallanes cuando pegó un grand slam que volteó la pizarra en las postrimerías del encuentro. Asimismo, el 30 de noviembre de ese año realizó un triple play sin asistencia en el eje portugueseño Araure-Acarigua, frente a Pastora de Los Llanos, ante conexión de Ron Calloway con Ramón Hernández en la inicial y Eminson Soto en la intermedia. Ya cuenta 13 temporadas de acción en rondas eliminatorias ?contando hasta la 20014-2015- y ha participado en nueve semifinales y cuatro finales, además de una Serie del Caribe. Recordamos la postemporada de la 2005-2006, cuando sólo jugó un encuentro en el ?Round robin?, sin haber participado en la ronda regular, para luego dejar en cinco juegos promedio de .278 (de18-5) en la final ante Tigres de Aragua. Luego, en la Serie del Caribe realizada en las ciudades de Maracay-Valencia, su participación fue clave, al punto de convertirse en el factor de desequilibrio ante la representación de República Dominicana, Tigres de Licey, en los dos juegos. De hecho, anotó la carrera que le dio el segundo título a los Leones del Caracas en este clásico caribeño.